me ha venido este pensamiento y se ha quedado anclado en mi mente. lo de que hacerse la tonta es de ser muy lista es una frase que he escuchado varias veces y que, sin saberlo, había integrado en mi día a día, pero era algo que nunca me había parado a reflexionar.
siento que muchas veces, por mi forma de ser o de expresarme, la gente me puede leer como una persona tonta (esta reflexión la saqué un poco por el artículo de _leonera). puede ser porque me muestro alegre, o simplemente una buena persona. es bastante fuerte que a alguien se le haga de menos por no mostrarse seria o por no ser una cabrona. a mí me ha pasado y me sigue pasando.
también he pensado en las ocasiones en las que me siento tonta, como cuando estoy en clase y una compañera tiene una ocurrencia brillante que a mí ni se me habría pasado por la cabeza. creo que no me he sentido tan estúpida como en las clases de la carrera. no sé de dónde ha salido esa gente, ni a lo que han dedicado su tiempo a lo largo de su vida para convertirse en semejantes máquinas de pensar. bueno, en realidad sí que me hago a la idea.
muchas veces pienso en cómo será la vida de esas personas en realidad, a qué dedican su tiempo libre, si tienen algún pasatiempo o algo que les haga felices de verdad fuera del ámbito académico. luego pienso que estoy generalizando y que seguramente tenga algo de envidia porque saben priorizar a lo que dedican el tiempo mejor que yo y por ello aprenden más en el día a día. y también hay personas a las que se les dan bien ciertas cosas de forma innata. mira, no tengo ni idea.
lo único que sé es que durante toda mi existencia he priorizado mi disfrute. creo que no conozco a nadie más hecha para la tranquilidad y el divertimento que yo. con esto quiero decir que siempre he priorizado lo que a mí me interesaba en el momento, aunque eso me llevara a no conocer ciertos temas o a perderme información sobre cierto asunto. puede que sea algo egoísta, pero si algo me causa malestar, prefiero no saberlo. sí es cierto que muchas veces lo agradezco porque, si puedo ahorrarme malestar, lo voy a hacer, pero otras veces me arrepiento de no haberme enterado de x tema en el momento porque más adelante he llegado a sentirme perdida y bastante tonta. sin embargo, también creo que depende del punto de vista: ¿soy tonta por saberme toda la vida de taylor swift? alguien pensará que para qué quiero saber eso si no me sirve de nada pero, ¿y lo que he disfrutado mientras iba descubriendo cosas nuevas sobre ella?
creo que ciertas cosas me han venido cuando ha sido el momento propicio. el ejemplo más claro es que he vuelto a ver ciertas películas recientemente y que hace años, cuando las vi por primera vez, no llegué a entenderlas bien, y es que considero que hay ciertos temas para los que tienes que estar más preparada (o en mi caso, más abierta de mente) que otros.
y algo que me encanta es hacerme la tonta… se me da genial. no te haces una idea de las veces que me hago la tonta en mi día a día, soy una actriz 3 60. si es cierto que puede que abuse de este método, lo que es un poco peligroso porque tampoco está bien pasarse y causar impresiones falsas a los demás sobre tu manera de ser, pero no sabes la de información que se puede conseguir haciéndose la tonta. al final he acabado descubriendo más cosas haciendo como que no tengo ni idea de un tema que haciendo como que me interesa y forzándome a investigar sobre ello. además, me ha ayudado a huir de situaciones a las que no quería enfrentarme, o a preguntas que no quería contestar. me hago la que no me entero y listo (se hace la que no me conoce como me enseñó jbalvin).
no sé muy bien a lo que quería llegar con todo esto. era una reflexión que tenía y que quería sacar a la luz. creo que todo se resume en que cada uno hace lo que puede dentro de su contexto, que cada persona sabrá más de unos temas que otra y que hacerse la tonta, a veces, es de ser muy lista.